Apenas terminó el duelo de octavos de final ante Gales, el entrenador de Dinamarca Kasper Hjuldmand levantó sus brazos para celebrar el contundente 4-0 que los puso en los cuartos de final de la Euro 2020. De paso, las cámaras revelaron un pequeño fashion faux pas: el suéter que llevaba tenía un agujero significativo justo en la axila.
En situaciones normales no debería ser la gran cosa, pero el hecho de que se trata del suéter cábala del técnico que dirige a la selección que todos estamos apoyando emocionalmente lo hace un tema trascendental.
La influencia mística de la prenda es innegable.
En el primer partido de esta Euro, ante Finlandia -tristemente célebre por el paro cardíaco que sufrió Chrsitian Eriksen-, Hjuldmand vistió un traje oscuro con camisa y tenis blancos. Dinamarca cayó 1-0.
Ante Bélgica repitió la idea, aunque sin chaqueta, y el resultado volvió a ser negativo: derrota 2-1.
Suéter Cábala de Kasper Hjuldmand
El cambio radical vino ante Rusia, en un partido que Dinamarca necesitaba ganar de manera resonante para poder avanzar. Hjuldman introdujo un suéter negro con cierre y acabó con un glorioso 4-1 a favor.
Ante Gales volvió a salir del clóset y consultado por el orificio, Hjuldmand reconoció la importancia del suéter. “Hago lo que puedo para no ser supersticioso, pero lo había usado en Wembley (triunfo de Dinamarca sobre Inglaterra), en Austria y contra Rusia. Y luego pensé que ahora me iba a poner la maldita cosa una vez más", afirmó en conferencia, ante las risas de los presentes.
Por ahora, en Dinamarca las celebraciones por el triunfo son el tema principal, pero no sería raro que la suerte del suéter aparecerá en los próximos días. Sobre todo, considerando cómo se ha disparado la popularidad del entrenador.
La forma en que manejó la situación alrededor de Eriksen lo han convertido en una especie de líder emocional de la nación. "Kasper ha sido increíble en la forma cómo manejo todo eso, enfocándose en el hecho de que debíamos seguir jugando, pero sabiendo que la gente estaba en otro lugar. Al mismo tiempo, tenía que conllevar sus propios sentimientos. Él ha sido un entrenador y un líder. Estoy muy agradecido por tenerlo", comentó al diario BT, el capitán del equipo, Simon Kjaer.
"Él es bueno hablando con los jugadores, dándoles la libertad que muchos necesitan. También mostró sus sentimientos con todo lo que pasó con Christian y dijo que también necesitaba ayuda. Todo lo que ha pasado nos ha acercado mucho más. Él es un buen entrenador y ahora es también un amigo para nosotros", agregó Joakim Mæhle.
En cuartos, ante República Checa o Países Bajos, es claro que debe volver a ponerse el suéter. La pregunta: ¿debe reparar el agujero o dejarlo así? Aquí, me quedo con la segunda opción.