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Lionel Messi es uno de los jugadores de habla más suave del mundo. Si no fuera constantemente uno de los dos mejores, si en vez de eso fuera un jugador medio que saliera al campo para el Stoke City cada fin de semana, entonces hay razones para creer que sólo los fans más duros sabrían quién es. Es increíblemente irónico, entonces, que haya subido a la fama en los albores de la era de las redes sociales, en un momento en el que todo el mundo se está haciendo un nombre a través de sus personalidades. Los gustos y los clics importan más que las noticias y los hechos, y Messi se ha elevado por encima de todo. La ironía del éxito de Messi no se le escapa.
En una entrevista con Guillem Balague para Yahoo Sports, se le preguntó a Messi sobre lo que es ser una estrella en la era de las redes sociales.
Balague preguntó: "El mundo del fútbol a veces parece algo de otro planeta. Se instigan debates artificiales, se dicen mentiras como si fueran la verdad, y se da gran importancia a las cosas que importan muy poco. ¿A veces te sientes como alguien de otro mundo, un niño en un mundo lleno de locos?"
A lo que Messi respondió: "Sí, por desgracia vivimos en una sociedad que vive a 1000 kms. por hora, y en un deporte tan popular como el fútbol que crece y crece y se convierte en la válvula de escape de los problemas de mucha gente".
Hora de la siesta en la casa de Messi. Thiago está en el sofá hacia la izquierda, Lionel hacia la derecha. Mateo está en la cuna. Foto: @KawdaBoy | Twitter
Messi sabe que está tocando frente a un público masivo, pero no deja que eso le afecte. De hecho, tocar simplemente porque le gusta hacerlo, y porque es su trabajo hacerlo, es lo único que Messi menciona que quiere que sus hijos Thiago y Mateo entiendan de él.
"¿A quién intentas impresionar cuando sales al campo?", preguntó Balague en un momento de la entrevista. "¿A los aficionados, a tu padre, a tus hijos, a tu mujer? ¿A quién necesitas para decirte que lo hiciste bien?
"No necesito impresionar a nadie porque no es por eso que juego", dijo Messi. " Yo juego porque me gusta y porque es mi profesión aunque, a decir verdad, me gustaría que mis hijos entendieran lo que hago. "
Messi quiere que sus hijos entiendan lo que él cree que es ser un futbolista profesional. Uno que no anhele el centro de atención, o la aprobación de otras personas.
Messi apenas quiere oír hablar de sí mismo. Cuando le preguntaron si leería aunque sea una pequeña parte de un libro retórico de Messi, respondió inequívocamente: "De verdad que no. Como he dicho antes prefiero vivir el momento y no mirar ni al pasado ni al futuro."
Messi se mantiene fiel a sí mismo. Lo hace prestando atención a lo que le gusta y persiguiéndolo. Lo hace diciendo en el momento, no viviendo en el pasado o preocupándose por el futuro. El éxito de Messi ha llegado al mantenerse fiel a sí mismo. Si eso no es un indicio de una gran lección para transmitir a la próxima generación, entonces ¿qué es?
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